Fuentes: Web oficial U.D. Las Palmas
Nace en Las Palmas de Gran Canaria en la zona del Puerto de La Luz el 19 de Marzo de 1927.
Sus comienzos fueron como todos los niños de la época, dándole patadas a las pelotas de trapo y a las chapas en la calle Tenerife de la playa de Las Canteras. También en el colegio de los Padres Franciscanos junto a Pepe Mesa, Zacarías Betancor, Padrón, Manolo Torres y los hermanos Silva.
El Unión Betis fue su primer equipo federado en edad infantil. Fue su hermano Paco quien posteriormente lo llevó a un equipo que se llamaba Madrid de la Plaza de La Feria y jugaba los partidos en el campo del Marino. De allí pasaría al Real Hespérides donde tendría de nuevo como compañero a Manolo Torres. Ambos jugadores militarían en muchos equipos estando juntos hasta finalizar su carrera deportiva.
En el Real Hespérides se proclamaría Campeón de Canarias jugando por aquel entonces en la demarcación de delantero centro.
Más tarde llegaría a alinearse un encuentro con el Marino pero siendo su entorno familiar victorista terminaría fichando por este club donde se proclama Campeón del Archipiélago al vencer al Hespérides de La Laguna en el campo de La Manzanilla.
En uno de los desplazamientos que hacía con su equipo a Tenerife, coincidió que fue al partido un directivo del C. D. Málaga, ofreciéndole un contrato muy ventajoso para la época.
Gilberto Beneyto firmaría por de cinco años con el club malagueño, fecha que no llegó a a cumplir jugando su último encuentro precisamente contra la U. D. Las Palmas en la liguilla de Ascenso a Primera División.
Después de terminar el encuentro y comunicarle al entrenador Ricardo Zamora su decisión de dejar el Málaga y abandonar el fútbol quedándole aún tres años de contrato, el club andaluz le declararía en rebeldía.
Con posterioridad los dirigentes de la U. D. Las Palmas llegarían a un acuerdo con el C. D. Málaga para el traspaso del jugador a la entidad amarilla.
Beneyto era un defensa contundente y viril siendo archiconocidos sus duelos con Alfredo Di Stéfano llegando ambos jugadores a ser expulsados del terreno de juego.
Jugador con dominio de ambas piernas podía ocupar cualquier demarcación en la defensa – formando una de las retaguardias más populares en toda la historia del club, integrada por Pepín, Beneyto, Beltrán y Marcial.
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